El exceso de lípidos en el torrente sanguíneo puede acortar la esperanza de vida, pues se adhieren a las paredes de las venas y causan enfermedades cardiovasculares. Para corregir esta situación, los científicos desarrollaron las estatinas, un grupo de fármacos que regula los niveles de colesterol malo y disminuye el riesgo de cardiopatías. Una de las más conocidas es la atorvastatina, que controla las plaquetas, produce un efecto antiinflamatorio y evita las embolias.
¿Para qué sirve la Atorvastatina?
La función principal de la atorvastatina es inhibir la enzima HMG-CoA reductasa, que se halla en el hígado y juega un papel crucial en la producción del colesterol. Con esto disminuye las posibilidades de afecciones coronarias por obstrucción de las arterias. Sus componentes hacen que merme el colesterol malo y aumente el bueno. De hecho, es muy común que se incluya atorvastatina como complemento en dietas para la pérdida de peso. A pesar de su eficacia, debe engranarse con una alimentación balanceada y una rutina de ejercicio.
¿Quiénes la toman?
El grueso de los pacientes que consumen atorvastatina lo conforman niños mayores de 10 años y adultos. Su administración a infantes responde a situaciones específicas. Por ejemplo, aquellos menores que padecen hipercolesterolemia homocigótica familiar, una patología muy extraña y potencialmente mortal, que se desarrolla por una mutación en el gen que se encarga de codificar o eliminar el colesterol de la sangre. Ante esta dificultad, los cúmulos de grasa se concentran en las arterias, impidiendo el paso del oxígeno al cerebro y a otros órganos importantes.
Dosis recomendada de atorvastatina
En el mercado farmacéutico se le puede encontrar en tabletas o capsulas. Además de su principio activo, cada pastilla contiene estearato de magnesio, carbonato cálcico, croscarmelosa sódica, polisorbato 80, lactosa monohidrato, hiprolosa y celulosa microcristalina.
Entre los ingredientes que recubren cada capsula se encuentran macrogol 8000, cera candelilla, estearatos emulgentes, dióxido de titanio (E171), ácido sórbico, hipromelosa, simeticona y talco.
De forma general, se recomienda la ingesta de 10 mg cada 24 horas de atorvastatina como punto de partida. Sin embargo, la dosis podrá variar según las particularidades de cada caso y los efectos que se pretendan lograr con el tratamiento. El especialista irá ajustando las cantidades tras las respectivas mediciones. Hay situaciones que requieren una modificación en las indicaciones cada 30 o 45 días. Todo ello a consciencia de que el consumo diario del fármaco no debe sobrepasar los 80 miligramos.
Efectos secundarios más comunes producidos por la Atorvastatina
Se clasifican como comunes, a las secuelas del tratamiento que inciden en el 10% de las personas que lo usan.
Al respecto de la atorvastatina, pueden mencionarse los dolores musculares, episodios diarreicos, jaquecas, sensación de vértigo, náuseas, dificultad para dormir, estreñimiento, problemas digestivos y alza de aminotransferasa.
Este último puede corregirse con facilidad, reduciendo la dosis, pero realmente se da en pocas circunstancias.
A su vez, se catalogan como efectos secundarios raros a aquellos que se presentan solamente en el 0,1% de los consumidores. No obstante, es fundamental estar al tanto de su existencia. Una detección temprana puede ayudar a un tratamiento pertinente y eficaz.
Entre los síntomas de menor incidencia se hallan enfermedades musculares, insuficiencia renal, inflamación del páncreas, pérdida del cabello, función limitada del hígado, hinchazón del hígado y pérdida de la memoria. A ellos se les suman pesadillas recurrentes, impotencia en el coito, aumento en el volumen de las mamas masculinas, hipersensibilidad o irritabilidad. Asimismo, el paciente puede padecer la ruptura del tejido muscular (rabdomiólisis) y percepción anormal de los sentidos. Por último, pueden manifestarse anomalías a nivel neurológico como entumecimiento de manos y pies, dolor y debilidad.
Algunas contraindicaciones
Como sucede regularmente con otros medicamentos, hay ciertos segmentos de la población que no deben emplearlo. Se tienen los siguientes:
- En primera instancia, la ingesta de atorvastatina se desaconseja en personas alérgicas a su principio activo.
- Tampoco se recomienda a quienes tengan un historial médico de enfermedades renales.
- Las personas con dificultades hepáticas o que superen los 70 años no deberán consumir esta estatina. Casos similares lo conforman personas que padezcan hipotiroidismo, que sean intolerantes a la lactosa –puesto que el fármaco la contiene-, así como pacientes alcohólicos.
De igual forma, se contraindica para personas con función hepática disminuida o limitada. Las mujeres embarazadas no deberán tomarla debido a que influye en el correcto crecimiento del embrión y el feto.
Por otra parte, este fármaco se encuentra contraindicado para las mujeres lactantes. Esto constituye una medida preventiva. Actualmente, todavía no se ha comprobado si la atorvastatina o los metabolitos se segregan por medio de la leche materna.
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