Hipermetropía
Si tu visión es borrosa e incómoda a corta distancia, es posible que padezcas de hipermetropía. Este defecto ocular se produce cuando la luz no incide directamente en la retina sino detrás de ella, impidiendo que las imágenes se enfoquen claramente. Esto ocurre en personas que tienen el ojo más corto de lo normal o presentan deficiencia en la potencia óptica del cristalino y/o la cornea.
Ibuprofeno
El ibuprofeno es un medicamento que funciona como antiinflamatorio no esteroideo (AINE), y es muy utilizado como analgésico y antipirético. Es uno de los más consumidos a nivel mundial por sus múltiples indicaciones.
La miopía
La miopía es uno de los defectos oftalmológicos más comunes. Ocurre cuando hay un defecto en el enfoque visual porque las imágenes solo pueden captarse por delante de la retina y no sobre ella, que es lo normal. En palabras sencillas, usted padece de miopía cuando no logra tener una visión clara desde largas distancias.
Quiste sebáceo
La presencia de sacos cerrados bajo la piel, compuestos por un material similar al queso y aceitoso, se denomina quiste sebáceo. A pesar de que suelen ser benignos, es importante prestarles mucha atención, ya que podrían ameritar una intervención quirúrgica para ser removidos.
La presbicia
La presbicia es un trastorno ocular que se manifiesta cuando la luminosidad de cuerpos hallados a cortas distancias del ojo hace foco en la región posterior de la retina, provocando una pérdida de orientación que dificulta la visión cercana. Es un proceso normal asociado con la edad, que suele aparecer a partir de los 40 años, debido al “envejecimiento” del ojo y a la pérdida de elasticidad del cristalino, un lente natural de forma biconvexa que se ubica tras el iris y delante del humor vítreo, cuya función es enfocar objetos desde diferentes distancias.
Hemólisis
La hemólisis es básicamente la descomposición de eritrocitos (glóbulos rojos), que provoca una liberación de la hemoglobina en el torrente sanguineo, asociada con daños renales y otras enfermedades. Por lo general, los glóbulos rojos viven entre 110 y 120 días. Posteriormente, se destruyen de manera natural y son eliminados de la circulación por medio del bazo.
Hipocinesia
La Hipocinesia es un trastorno que afecta la extensión y velocidad de los movimientos voluntarios. Está asociada con enfermedades neurológicas degenerativas como el mal de Parkinson, psicosis depresivas, patologías de los ganglios basales e inactividad prolongada.
Ataxia Cerebelosa
Los niños suelen presentar afecciones simples y comunes como fiebre, vómito o diarrea, pero también corren el riesgo de desarrollar enfermedades tan extrañas como peligrosas. La Ataxia Cerebelosa es una de ellas y se manifiesta como una incapacidad para controlar y coordinar los movimientos musculares, provocada principalmente por lesiones en el cerebro o el cerebelo. Las consecuencias son tan graves, que puede discapacitarlos o confinarlos a una silla de ruedas para siempre.
Síndrome de West
Los espasmos son el principal signo del Síndrome de West, una enfermedad que pertenece al grupo de encefalopatías epilépticas catastróficas, que afecta, principalmente, a niños menores de un año. Los prematuros y los nacidos con hipoxia neonatal (mala oxigenación cerebral) son más propensos a desarrollarla. Aunque los pronósticos no son alentadores, con una detección oportuna y un tratamiento adecuado, se pueden controlar los síntomas y mejorar la calidad de vida del pequeño.
Síndrome urémico hemolítico
La bacteria E. Coli es la principal causa del Síndrome urémico hemolítico, una enfermedad que ocurre cuando sustancias tóxicas destruyen los glóbulos rojos y dañan los riñones.