La lincomicina es un antibiótico natural que pertenece al grupo de las lincosamidas, y es extraído de un hongo que lleva por nombre Actinomyces Streptomyces lincolnensis. Tiene una amplia y buena actividad contra las bacterias aerobias gram positivas, entre las que destacan neumococos, estafilococos y estreptococos.
De acuerdo a los estudios realizados por investigadores y científicos de distintos centros y universidades, este medicamento difunde los líquidos orgánicos de buena manera en la mayoría de los tejidos. Esto lo convierte en un tratamiento muy efectivo para las infecciones provocadas por gérmenes, tanto anaerobios como aerobios.
La lincomicina también actúa contra organismos como el mycoplasmas y algunas especies de plasmodium, pero es inactiva frente a la mayoría de los bacilos gram negativos, como enterococos y neisseria meningitidis. Su espectro es medio, en comparación con otros antibióticos.
La lincomicina es uno de los fármacos que han sido modificados estructuralmente para elaborar la clindamicida, un antibiótico utilizado para erradicar y controlar las infecciones bacterianas.
Uso clínico de la lincomicina
Este tipo de antibióticos es recetado por los doctores cuando sus pacientes presentan infecciones del aparato respiratorios, entre ellas amigdalitis, faringitis, neumonía, otitis media, sinusitis y bronquitis.
La lincomicina también ejerce su acción en casos de difteria e infecciones en los tejidos blandos y en la piel (ántrax, forunculosis, acné y abscesos). Asimismo, ataca los padecimientos del tracto urinario causados por microorganismos gram positivos, y las infecciones de articulaciones y huesos como osteomielitis, siendo ésta una de sus principales indicaciones. Además, está recomendada para sanar otras enfermedades como endocarditis bacteriana septicemias y escarlatina.
Aplicación
La lincomicina puede colocarse vía intramuscular o intravenosa, para combatir infecciones graves generadas por cepas que son susceptibles a neumococos, estafilococos y estreptococos, como se mencionó anteriormente.
Este medicamento no debe aplicarse en pacientes alérgicos a la penicilina y su uso está asociado a la aparición de colitis seudomembranosa, por lo que si la persona se muestra vulnerable a la enfermedad, el doctor deberá considerar su sustitución por otro antibiótico. Vale decir, que esta versión del fármaco posee alcohol bencílico, razón por la que no se recomienda en bebés prematuros ni lactantes menores de mes.
Por otro lado, hay que resaltar que la lincomicina también viene en una presentación en cápsula que contiene lactosa, por lo que queda prohibida su utilización en individuos intolerantes.
composición de la Lincomicina
- Pastillas: 500 mg del principio activo, talco, lactosa y estearato de magnesio.
- Ampollas: Cada ml posee 9.45 mg de alcohol bencílico y el resto es agua.
dosis de Lincomicina
Las cantidades pueden variar según la condición clínica del paciente, pero por lo general se indica de la siguiente manera:
- Vía oral: 1 píldoras de 500 mg cada 8 horas para infecciones moderadamente severas. Si son graves la ingesta debe ser cada 6 horas.
- Vía intramuscular: En adultos con infecciones moderadamente graves, 600 mg/2ml cada 24 horas, y para infecciones severas la misma posología cada 12 horas. A los niños de más de un mes de edad, 1 inyección de 10 mg/kg/24 horas o más frecuentemente, dependiendo de la gravedad de su estado.
- Vía intravenosa: En adultos 600 mg/2ml disueltos en no menos de 100 ml de glucosa al 5% o en solución salina normal, por no menos de 1 hora. En infantes de más de 12 meses, 10 a 20 mg/kg/día, dividido en 2 ó 3 dosis y administrada como infusión cada 8 a 12 horas.
contraindicaciones de la Lincomicina
- El uso de este medicamento está contraindicado para todas aquellas personas que son alérgicas a su principio activo y demás componentes. En ese caso, se debe consultar con el doctor. Los síntomas de la alergia a este antibiótico pueden abarcar dificultad respiratoria y crisis de asma, hinchazón de la cara y lengua-siendo muy crítica si afecta las cuerdas vocales-picazón en el cuerpo y pérdida del conocimiento.
- Quienes padezcan de algún trastorno neuromuscular, antecedentes de colitis, enfermedades del riñón, endocrinas, metabólicas o hepáticas, también deben hablarlo con el médico, pues su uso podría estar contraindicado.
- Es importante saber que la lincomicina interfiere con los resultados de las pruebas analíticas de transaminasas y fosfatasa alcalina, alterando sus resultados.
- Se debe prestar mucha atención, pues el uso de este fármaco puede derivar en padecimientos gastrointestinales, hipersensibilidad, así como efectos adversos en la sangre, el hígado, las mucosas, la piel y el riñón. Hay que lees la prescripción y preguntarle al especialista.
lincomicina y otros medicamentos
Es vital mantener una buena comunicación con el médico e informarle si se está utilizando otros medicamentos e incluso productos de plantas medicinales, ya que la lincomicina presenta interacción con el Cloroformo, Halotano, Tricloroetileno, Bloqueadores neuromusculares, Eritromicina, Metoxiflurano, Kanamicina y novobiocina, Enflurano, Ciclopropano, Isoflurano y Antidiarreicos, entre otros.
Absorción adecuada
Si se busca una absorción adecuada de este medicamento, se debe evitar tomarlo dos horas antes y dos horas después de las comidas. Si es consumido vía oral, suele reducirse la absorción cuando se administra junto a ciclamatos que se encuentran en bebidas y alimentos. No debe ingerirse bajo ningún concepto con bebidas alcohólicas.
En el embarazo y la lactancia
Estudios realizados han demostrado que la lincomicina atraviesa la placenta y alcanza el cordón umbilical con una pureza de 25 %, y hasta ahora no se cuentan con estudios controlados en mujeres embarazadas que demuestren que su uso es inofensivo para el feto.
Este antibiótico será administrado durante el embarazo si el doctor considera que la utilización del mismo sobrepasará el riesgo que representa para el bebé no nacido.
El paciente tiene que seguir las instrucciones de administración que fueron indicadas por su médico para prevenir efectos adversos.
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