Tizanidina

La tizanidina es un fármaco muy usado para calmar los espasmos y aumentar el tono muscular en pacientes que han sufrido accidentes cerebrovasculares, lesiones cerebrales o de la médula espinal y esclerosis múltiple, una enfermedad del sistema nervioso central que causa debilidad, entumecimiento y pérdida de la coordinación muscular, problemas de la vista, dificultad del habla y descontrol urinario, entre muchos otros síntomas.

Esta medicina entra en la lista de los llamados relajantes del músculo esquelético, y su función es ralentizar la acción del cerebro y del sistema nervioso, para que los músculos se relajen. Una de sus denominaciones comerciales más conocidas es Zanaflex.

Cuando hay trastornos muscoloesqueléticos que comprometen las articulaciones, ligamentos y nervios, se suele indicar tizanidina, pero también se aplica cuando hay diagnósticos de espasticidad, una patología que incrementa las contracciones musculares con reflejos tendinosos exagerados. Con ella se vinculan las ya mencionadas lesiones de la médula espinal, la parálisis cerebral y el síndrome post-apoplejía. Estas patologías son tan dolorosas, que pueden trastornar completamente la capacidad funcional de la persona. Muchos pacientes afectados reflejan distonía (contracciones involuntarias), fatigabilidad (disminución del músculo para generar fuerza) y paresia (ausencia parcial o total de movimiento), entre otros padecimientos de mayor complicación.

Otras indicaciones de la Tizanidina

Como se dijo, es medicada en casos de espasmos musculares dolorosos ligados a trastornos estáticos y funcionales de la columna vertebral como síndromes cervicales y lumbares. También se puede aplicar después de intervenciones quirúrgicas de hernia disco intervertebral u osteoartritis de cadera, y en situaciones de mielopatía crónica, conjunto de síntomas que afectan a la médula espinal por acción de tóxicos, infecciones, enfermedades genéticas o deficiencia de nutrientes y vitaminas. No necesariamente involucran inflamaciones y traumatismos, pero hay excepciones.

Como sucede con otras medicinas es importante seguir las instrucciones de la receta al “pie de la letra”. No se debe aumentar, ni disminuir la dosis, tampoco ingerir con más frecuencia que la indicada por el médico.

Presentación de la Tizanidina

La tizanidina se ofrece en tabletas y cápsulas para administrarse oralmente. Suele ingerirse dos o tres veces al día, ya sea con alimentos o sin ellos. Aparece en el mercado en presentaciones de 2, 4 y 6 mg, en envases de 30 comprimidos.

Generalidades sobre la ingesta

• En adultos es recomendable una dosis de 8 mg. Por lo general el tratamiento se inicia con una dosis única de 4 mg y se va aumentando hasta lograr el efecto óptimo, que es la reducción del tono muscular con una cantidad tolerable para el paciente. La toma puede ser en intervalos de 6 a 8 horas, según sea necesario, hasta un máximo de tres dosis en 24 horas.
• En ancianos se debe utilizar tizanidina con precaución.
• En niños y adolescentes el uso seguro y eficaz no se ha establecido.
• Debido a su efecto de corta duración, tizanidina debe reservarse para las actividades y los momentos en los que el control de la espasticidad es más importante.
• Es vital respetar el horario reglamentado. Si se olvida una dosis, ésta debe tomarse tan pronto como sea posible y volver a la pauta normal. Pero si el tiempo que falta es poco para la siguiente dosis no debe duplicarse, y se debe continuar la ingesta con el horario habitual.

Composición

Cada comprimido o tableta contiene 2 mg de tizanidina (tizanidina clorhidrato), además de lactosa, óxido ferrosoférrico, dióxido de silicio, gelatina, hipromelosa, celulosa micro cristalina, hidróxido de potasio, propilenglicol, óxido férrico rojo, laca, talco, dióxido de titanio y óxido férrico amarillo. La composición de las diferentes presentaciones puede variar de un país a otro.

Contraindicaciones de la Tizanidina

• No debe usarse tizanidina si se es alérgico o sensible a este principio activo o a los otros componentes del fármaco.
• Tampoco debe tomarse si la persona sufre de asma, dificultad respiratoria, hinchazón de cara, labios, lengua u otro lugar del cuerpo.
• Su utilización debe restringirse si hay molestias en las cuerdas vocales o se padece de urticaria, picor, erupción cutánea, pérdida de conocimiento, palidez, sudoración, y otros.
• No se debe tomar este medicamento si se está en tratamiento con fluvoxamina (antidepresivo) o ciprofloxacino (antibiótico).
• Si se padece de insuficiencia renal y/o hepática es mejor abstenerse de emplear. Tizanidina. Lo mismo si se cumple un tratamiento con antihipertensivos, ya que puede provocar bajas de presión arterial, desmayos, pérdida de conciencia o colapso circulatorio.
• Si se está tomando anticonceptivo oral, se debe informar al médico, quien valorará los posibles ajustes de la dosis, ya que los anticonceptivos pueden interferir o potenciar los efectos del relajante muscular.
• En casos de embarazo y lactancia, el galeno decidirá sobre la conveniencia o no de usar este medicamento.
• No se debe conducir ni utilizar ningún tipo de maquinaria peligrosa mientras se toma este medicamento. Tampoco se debe ingerir alcohol ni drogas.

Posibles reacciones a la tizanidina

Como muchos medicamentos, la tizanidina puede tener algunos efectos adversos, aunque no todas las personas los padezcan, entre ellos:

• Perturbaciones del sistema nervioso, somnolencia, mareos.
• Trastornos cardiovasculares como hipotensión arterial y bradicardia.
• Malestares digestivos y resequedad de la boca.
• Fatiga y debilidad muscular.
• Anomalías psiquiátricas, alucinaciones e insomnio.
• Perturbaciones digestivas y hepáticas, náuseas, alteraciones gastrointestinales, aumento transitorio de transaminasas.
• Daños hepáticos como hepatitis aguda e insuficiencia hepática.

Estas no son todas las reacciones adversas relacionadas con el uso de tizanidina. Si se observa cualquier otra no descrita en este artículo, se debe recurrir al especialista.