Estar enfermo no es agradable, es espantoso, se adquiere un aspecto terrible y los tratamientos, muchas veces, son igual o más severos que la propia enfermedad. Sin embargo, existe una condición denominada trastorno facticio, en la cual la persona, de manera consciente e intencional, se comporta como si estuviera enferma física y mentalmente, cuando en verdad no lo está.
Los individuos con esta condición, mienten premeditadamente sobre los síntomas o se lesionan para fingir estar enfermos. Esta conducta es considerada un trastorno porque se asocia a problemas emocionales peligrosos, aparte de que los afectados por esta psicopatología sufren de otras dificultades mentales, como alteraciones de la personalidad e inconsistencias en el trato con los demás
Los pacientes con trastorno facticio se distinguen de los hipocondriacos, que ignoran que son ellos los que provocan sus síntomas, y también se diferencian de los que inventan una afección con un propósito específico como no asistir al colegio o al trabajo.
Al recibir la atención y los cuidados de sus seres queridos así como de los médicos, tienden a dejar de lado su conducta psicológica, pero al no ser objeto de atención, vuelven a engañar para recobrarla.
Tipos de Trastorno facticio
De acuerdo a los síntomas que genera, existen cuatro variedades de trastorno facticio, que se describen a continuación:
- Trastorno facticio con señales psicológicas: Las personas repiten los síntomas propios de la esquizofrenia, por lo que suelen fingir desconcierto, emitir afirmaciones incoherentes y manifestar alucinaciones y delirios. También dicen oír voces extrañas.
- Trastorno facticio con síntomas físicos: Los sujetos con este trastorno aseveran sentir los síntomas de enfermedades físicas, tales como dolores de pecho, cabeza, molestias estomacales, fiebre y otros. Se conoce como Síndrome de Munchausen.
- Trastorno facticio con señales psicológicas y físicas: Con esta perturbación, las personas declaran padecer síntomas tantos físicos como mentales. Es una de las variantes más peligrosas y preocupantes para los familiares del aquejado.
- Trastorno facticio no explícito: Este parte de un trastorno conocido como trastorno facticio por poderes o Síndrome de Munchausen por poderes. En este tipo de trastorno, las personas imaginan los síntomas de enfermedades en individuos que están bajo su cuidado. Frecuentemente se observa en las madres, pero puede pasar con los padres, que adrede perjudican a sus hijos con el objeto de obtener atención.
Síndrome de Munchausen
El síndrome de Munchausen es un caso grave y extremo del trastorno facticio, que afecta a un 10% de los pacientes, con una gran capacidad de fingir, observándose casos de individuos que calientan el termómetro para hacer creer que tienen fiebre alta, se administran substancias peligrosas o se lanzan al piso simulando ataques epiléticos o convulsiones. Las personas con síndrome de Munchausen inclusive acuden a operaciones y métodos lastimeros con tal de obtener atención.
Es difícil diagnosticar el síndrome de Munchausen en una emergencia o visita rápida a un consultorio. Los médicos no lo detectan a priori. Cuando el sujeto es hospitalizado y se verifica que la historia difiere de los exámenes clínicos, es cuando se sospecha de la presencia del trastorno, y se remite el caso a un psicólogo o psiquiatra.
Tampoco es sencillo identificar a las personas que presentan un trastorno facticio leve, porque tienden a exagerar la sintomatología de la enfermedad que padecen y estas mentiras no suelen ser detectadas.
Es normal que cuando el paciente es descubierto o investigado, éste desaparezca del hospital y hasta de la ciudad, en busca de otro médico para continuar con su farsa.
Características del trastorno facticio
- Presencia de heridas.
- Aparición de síntomas adicionales tras resultados negativos de una prueba médica o psicológica.
- Historial médico inconsistente.
- Síntomas poco claros, incontrolables y que se tornan graves o cambian al comenzar el tratamiento.
- Manifestación de molestias solo cuando el paciente está siendo observado o está acompañado.
- Deseo de efectuarse operaciones y análisis.
- Negativa del paciente a que los médicos se entrevisten con amigos, familiares o médicos anteriores para indagar sobre la supuesta patología.
Causas del trastorno facticio
Las causas puntuales de este trastorno no son conocidas. Científicos creen que puede deberse a factores biológicos y psicológicos. Asimismo algunas hipótesis aseveran que es propio de pacientes que han pasado por abusos, abandono, desapego por parte de los padres o falta de amor en su infancia, y arrastran consigo problemas emocionales. También se ha visto en personas con una historia médica de enfermedades habituales, que han requerido hospitalización.
Tratamiento
Lo que se persigue al tratar el trastorno facticio, es alterar la conducta del paciente y descartar o disminuir la inadecuada utilización de los recursos médicos. Una vez logrado esto, lo siguiente es hallar la causa psicológica de este comportamiento.
La psicoterapia es el proceso por excelencia utilizado y la terapia cognitivo conductual es la más adecuada, ya que funciona sobre la conducta y el pensamiento del individuo. Asimismo, se recomienda la terapia familiar y la administración de antidepresivos y ansiolíticos, en casos más complicados.
Algunos especialistas optan por programar citas frecuentes tanto con médicos generales como con psiquiatras, para intentar disminuir esa falta de atención que los lleva a inventar síntomas inexistentes. Con una buena estrategia, tanto el síndrome de Munchausen como el trastorno facticio, pueden controlarse y curarse.
Lo importante es lograr que el paciente acepte su problema y acceda a aplicar las terapias sugeridas. Hacerlo es vital para prevenir otros trastornos psicológicos y evitar el rechazo de la persona en la sociedad, ya que su comportamiento no es bien visto, especialmente cuando se empieza a sospechar de la veracidad de los síntomas expuestos.
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